El don del arrepentimiento.

El arrepentimiento es un don de Dios. Definitivamente es un regalo dado a todo el que lo acepta. Existe una escuela de pensamiento que dice: que si una persona no se ha arrepentido es porque Dios no le a otorgado tal don para hacerlo ha dicha persona.

Me atrevo a decir que tal pensamiento viene del infierno. Ya que ese pensamiento a llevado a muchos a la resignación de que no pueden arrepentirse porque Dios no se los a permitido por causa de la falta de tal don. La biblia es muy clara al decirnos que en Dios no hay manchas de pecado, el es santo y como un Dios impecable jamas seria injusto para cobrar algo que el mismo no dio la capacidad de llevar acabo. De allí la escritura nos dice: “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;” (Hechos 17:30)

 

El arrepentimiento

El primer paso para obtener la vida eterna es el arrepentimiento. Nadie escapa de esta exigencia si quiere ser salvo. Meditemos en lo siguiente:

 Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan. (Hechos 17:30)

“Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados;…” (Hechos 3:19)

“Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.” (Lucas 13:3)

No existe otra alternativa. La otra alternativa del arrepentimiento es la perdición eterna. Sin tomar la decisión de arrepentirse no hay salvación. Muchos otros versiculos afirman la necesida del pecador de arrepentirse para obtener el perdon de Dios. Pero estos son suficientes para probar que todos necesitamos arrepentirnos y que el arrepentimiento produce el cancelamiento de nuestros pecados.